Santiago 26 de junio de 2025
Patricio Altamirano Arancibia.
En las primarias del año 2013 la Centro Izquierda Neoliberal convocó a 2.142.070
votantes. En las primarias del año 2021 bajó en 18%, llegando solamente a
1.754.943. Si se mantuviera esa misma tendencia a la baja, para estas primarias
del año 2025 se podría esperar una cantidad aproximada de 1.439.053.
Si la concurrencia fuera inferior a 1.439.053, implicaría una pérdida de su base
electoral, debido a las situaciones de corrupción y de abusos que han debilitado la
credibilidad de la ex Concertación, y del actual Frente Amplio. Si la cifra de
votantes es más cercana al millón, expresará una agudísima crisis.
Sí Jara obtuviera una votación similar a la de Daniel Jadue, que fue de 639.862 en
el año 2021, mostraría que la votación comunista no se vio afectada por la
corrupción y abusos. Si eso fuera así, además sería muy cercana a los 642.838
que el Partido Comunista obtuvo en su votación para concejales de la elección del
año 2024, mostrando una votación estable, sin desgaste electoral, que logra salir
airoso de los temas de corrupción y abusos.
Los votantes de las primarias del año 2013 fueron de la ex Concertación, y en
conjunto obtuvieron 2.142.070. En el año 2021 solo lograron 1.059.060, obtenidos
en verdad por Boric. Es decir, se debe considerar que él convocó al Frente Amplio
y a la ex Concertación, y que, por lo tanto, con él se perdió un 51% de la votación
de las primarias del año 2013, aunque Boric ganó la presidencial, su victoria
contiene una aguda crisis de representatividad.
En la elección de concejales del año 2024 la fuerza electoral de la ex Concertación
y del actual Frente Amplio superó con creces la votación de concejales del Partido
Comunista (642.838), por lo tanto, en una primera instancia Tohá o Winter
deberían ganar fácilmente a la candidata Jara, sin embargo, esa certeza
estadística se esfumó.
La inicial certeza se basaba en los resultados de las elecciones de concejales, y
se daba como un hecho la imposibilidad de cualquier triunfo de Mulet, por su
escasa fuerza en dicha elección, donde solo obtuvo 372.040 votos. También se
visualizaba como muy difícil una victoria de Winter, toda vez que el Frente Amplio
acumuló en Concejales solo 742.055 votantes.
En concejales fueron incomparables los 2.918.098 que obtuvieron las fuerzas que
hoy apoyan a Tohá, conformado por los 660.653 del Partido Radical, los 624.019
del PS, los 477.867 del PPD, los 332.911 del PDC y los 198.629 del Partido
Liberal. Sin embargo, esa certeza estadística se esfumó totalmente.
La gestión del presidente Boric, entre la última elección de concejales, y mayo de
este año, ha sido autodestructiva de la base electoral de la ex Concertación y del
propio Frente Amplio. Esto, porque su gestión agudizó la corrupción y los abusos,
con lo cual liquidó las posibilidades electorales de Tohá y Mulet, quienes en la
papeleta de las primarias representan la corrupción y los abusos de la ex
Concertación. Por su parte Winter representa en la papeleta la estafa electoral del
Frente Amplio.
La candidata Jara representa una tendencia comunista que está disociada de la
tendencia que representa Daniel Jadue, y en eso, él caracterizo a Jara como una
“comunista amarillenta”, en vez de destruirla, la convirtió en una “comunista
buena” y él se convirtió en un “comunista malo”.
La acción concurrente de la Fiscalía y la Contraloría, dejó a Jara al margen de los
casos: Convenios (FA), Monsalve (PS), Licencias Médicas (FA), Jadue (PC),
Hassler (PC) y Cariola (PC), a los cuales ahora se suma el caso Orrego (ex DC).
Esta acumulación de hechos ha creado en la opinión pública la impresión de que
Jara es una candidata desligada de la corrupción y de los abusos.
Si Jara gana, será un efecto no deseado de Jadue, de la Fiscalía, y de la
Contraloría, porque a la postre la han beneficiado.
La posible victoria de Jara también afectará a la candidata Matthei porque a ella se
le asocia con la corrupción del ex Alcalde Torrealba (Renovación Nacional) y de
Barriga y Lavín Jr. (UDI), más la seguidilla de casos de alcaldes de Chile Vamos,
sumado el caso Hermosilla, que llega a afectar Andrés Chadwick Piñera, a quien
ha dejado en total silencio, a cambio de una “cierta” impunidad de la cual hasta
ahora goza. Todo esto gracias a la acción concurrente de la Fiscalía y de la
Contraloría.
Lo mismo sucede con Kast, en relación al alcalde de Macul (Republicano)
señalado por las licencias médicas, y con la republicana Ximena Jiménez Farías
en el caso del fraude tributario más grande de la historia, entre otros.
Recuerden que Jovino Novoa fue sentenciado por boletas ideológicamente falsas,
y con esto él se fue a los cuarteles de invierno. Recuerden que Sebastián Piñera
en el caso Talca creó empresas ideológicamente falsas, y fue salvado por su red
familiar.
Como vemos las acciones ideológicamente falsas es una creación de la derecha,
que fue imitada por la ex Concertación y el actual Frente Amplio.